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Responsable: Dr. Alfons Endres. Email: alfonsendres10@gmail.com y alfons_endres@hotmail.com Teléfono: (+58)04128620515 Todos los temas aquí expuestos son de mi autoría, a menos que se especifique lo contrario.

lunes, 9 de mayo de 2016

Salud - Enfermedad




La Clínica Mayo en el año 2003, publicó un librito titulado: “viva más, viva mejor” Consejos personales de los expertos de la Clínica Mayo. En el publica una serie de estrategias para mantener una buena calidad de vida... En la introducción podemos leer: “Para vivir mas y mejor  de acuerdo con los expertos de la Clínica Mayo, es importante mantener la salud desde el punto de vista físico, pero también desde el mental”.
Estrategias:
1-Manténgase físicamente activo
No tiene que ser doloroso ni agotador para beneficiarlo, actividades de intensidad moderada como caminatas, jardinería o trabajo en la huerta, pueden mejorar su salud, si se realizan con regularidad.
2-Ejercite su mente
Leer, hacer crucigramas, aprender un idioma extranjero... conservan a su mente aguda y ágil.
3-Haga de la salud una prioridad
·    Lleve una alimentación sana
·    Mantenga un peso saludable
·    Visite regularmente a su médico
·    Tome tiempo para escuchar su cuerpo
4-No fume
“Nunca es demasiado tarde para dejarlo”
5-Invierta en las relaciones importantes de su vida
No subestime la importancia de aquellos cercanos a usted, ya sea su cónyuge, sus hijos o sus amigos cercanos... una buena relación con la gente que considera su familia puede desempeñar un papel importante en su salud.
6-Dése tiempo para las cosas que disfruta
Jardinería, manualidades, reformas en su hogar, jugar a las cartas, leer, viajar por el mundo, jugar con su mascota...
7-Manténgase en contacto con la comunidad
Ya sea como voluntario de alguna causa o simplemente siendo amistoso con alguien, ser parte de una red de personas puede beneficiarlo en los aspectos físico y mental.

Comentario

Este planteamiento estratégico expuesto por esta reconocida institución, creo que nos puede servir de referencia para tener una idea de lo mínimo que podemos hacer por nosotros, tanto preventivamente como curativamente. Algunos elementos nos son muy familiares, por escucharlos siempre: haga ejercicio, no fume, haga de su salud una prioridad; pero otros nos pueden sorprender porque no estamos acostumbrados a considerarlos importantes para nuestra salud: ejercite su mente, invierta en las relaciones importantes de su vida, dése tiempo para las cosas que disfruta o manténgase en contacto con la comunidad. Los invito a conocer estas estrategias, para que las apliquen y no tengan que temer por su salud.
Uno de los puntos que me cuesta compartir con mis colegas de la Clínica mayo es: Visite regularmente a su médico. Insisto: “El que no la debe no la teme”, por tanto, si sigo estas estrategias, “no tengo porque estar buscándole la quinta pata al gato”. Si aparece un síntoma, sea sensato: revise su vida, ¿que está haciendo mal? y no es para fustigarse y culparse, ¡no! es para aprender, reconocer lo que me hace daño y corregirlo.
Cuando un animal se siente mal, el se recoge, ayuna... se queda quieto; cuando el ser humano se siente mal, se pone bravo, corre para allá, corre para acá, entra en Internet, llama a su doctor, llama a su otro doctor, visita a otro doctor, se hace el laboratorio, la placa... todo un drama... ¡CALMA! aprende del perrito, del gatito,  ¡QUIETO!, ¡MEDITA!, ¡RESPIRA!, ¡AYUNA! Pregúntate: ¿Qué me está pasando?, ¿Por qué a mí? analiza tus relaciones, tu conducta, revisa tu alimentación, tu actividad física, tu estilo de vida... ¡SE HONESTO! ¿Esta todo bien? entonces calma, dale tiempo a tu cuerpo que reaccione y resuelva; ¿No esta bien, te descuidaste en esto, vagueaste, fuiste demasiado permisivo en lo otro?, tranquilo, CAMBIA y dale tiempo a tu cuerpo para que reaccione y resuelva. El cuerpo tiene una capacidad de autosanacion sorprendente, pero hay que dejarlo actuar... normalmente demoramos 5, 10 0 15 años para que aparezcan los síntomas y exigimos estar bien en 2 días.

OJO: Si no esta de acuerdo con lo antes expuesto, no siga estas indicaciones, sea fiel a usted y a sus convicciones.
Extraído del libro: “El Que no la debe no la Teme”- Alfons Endres


 



 

miércoles, 30 de marzo de 2016

Lian Gong - 2da Serie



2da Serie – Ejercicios para la prevención y tratamiento de los dolores de Espalda
Introducción
Los músculos de la espalda tienen como función principal mantener el cuerpo erguido. Muchos dolores en la cintura (región  lumbar) son debido a la debilidad de esos músculos.  Los movimientos y las posturas inadecuadas provocan diversas afecciones en la espalda (rotura de discos, vértebras luxadas, esguince de músculos y rotura de ligamentos) surge de la falta de cuidado con la espalda, principalmente en su región  más vulnerable, que es la lumbar.

Las causas más frecuentes de dolores en la cintura son:
a) Lesión Aguda.- Levantar o cargar peso y el uso inapropiado de fuerza pueden llevar a una lesión como: Desplazamiento de las articulaciones intervertebrales, espasmos musculares, distensión de los ligamentos. Por ejemplo: levantar un bebe, cargar una caja pesada, arrastrar un mueble son factores comunes causantes de dolores en la espalda.
b) Tensión.- Caminar (las mujeres) con tacones muy altos, trabajar con la espalda curvadas por mucho tiempo -mala postura al caminar, permanencia en pie, sentado o acostado-, todos estos factores pueden causar dolor en la cintura o en los" riñones" como es llamada por su localización. En estos casos, la musculatura y los ligamentos de la espalda se mantienen en tensión, pudiendo ocurrir lesiones en los mismos. Las alteraciones patológicas son espasmos, ruptura parcial de las fibras musculares (desgarros) y posibles adherencias y degeneración de loas tejidos blandos, que podrán transformarse en un proceso crónico, con dolor permanente por un largo período de tiempo.
c) Dolores en la Espalda causados por Viento Frío y Humedad. La medicina tradicional china considera también la acción del viento frío y la humedad como causantes de dolores en la región  lumbar. Cuando entran en contacto con el cuerpo, estos factores considerados como Qi (soplo o energía) perverso penetran en los canales, provocando a obstrucción de la circulación del Qi y de la sangre en la región  lumbar. En estos casos el dolor en la cintura no tiene un inicio agudo y es frecuentemente considerado como un dolor causado por irradiación de alguna lesión de los hombros, espalda, rodillas, etc. Los síntomas se agravan en el frío, viento, humedad y cambios c1imáticos.
d) Hernia de Disco.- El dolor en la región  lumbar, causado por hernia de disco, es resultante de la compresión de los ligamentos longitudinales posteriores de la columna, provocado por la protrusión de masa (disco intervertebral). En una   fase avanzada, puede existir la compresión de la raíz nerviosa y el dolor irradiará hacia las piernas y el pie (ciática). El dolor local y la sensibilidad pueden ser localizados en los espacios intervertebrales  Lumbar 4 y Lumbar 5 y la 1ra Sacra. El dolor causa espasmo en el músculo erector de la columna, limitando su movimiento.

Los movimientos de los ejercicios de esta serie fueron proyectados para aligerar el dolor, deshacer los espasmos del músculo erector de la columna y el músculo psoas, disolver adherencias, mejorar la movilidad de la columna, corregir escoliosis (desvío lateral de la línea vertical normalmente recta de la columna) y restaurar la curvatura anterior fisiológica de la columna Lumbar.

Importante: No olvide que mientras haga los movimientos de Lian Gong, debe mantener una buena respiración: Inspiración, Pausa y Espiración –Esta última normalmente mientras proyecta la energía (realizando el movimiento).

7mo Movimiento: Empujar el cielo e inclinarse hacia los lados 
Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas a la distancia entre los hombros. Dedos de las manos entrelazados a la altura del abdomen. Mirada al frente.
1: Levantar los brazos con los dedos entrelazados y las palmas hacia arriba hasta la altura del mentón (Transición 1). Seguidamente voltee las palmas y empújelas
hacia arriba por encima de la cabeza, estirando bien los brazos. Acompañe el movimiento de los brazos con la mirada (Transición 2). Enderece la cabeza mirando hacia el frente (Posición 1).
2: Inclinar el tronco lateralmente a la izquierda y  seguidamente retorne a la posición inicial (repetir el movimiento dos veces de acuerdo con el conteo) (Transición 3 y Posición 1).
4: Baje los brazos por la lateral del cuerpo, mirando la mano izquierda (Transición 4). Retornar a la posición inicial.
5: Haga los mismos movimientos que realizó en: 1,2,3 y 4 hacia el lado derecho.
6: Baje los brazos por la lateral del cuerpo, mirando la mano derecha. Retornar a la posición inicial.
Posición Final: Colocar los brazos sueltos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Al empujar para arriba, relaje la musculatura lumbar (de acuerdo con el principio de la alternancia entre tensión y relajamiento) y, al inclinar para el lado, mire para el frente, mantenga los brazos rectos y inclínese hasta el límite que permita el movimiento, al mismo tiempo que mantiene inmóviles las articulaciones de los hombros y de las caderas, para no girar el tronco, y mantenga las piernas estiradas
Sensación: Sensación de alivio en el cuello y cintura que se irradia hacia los hombros brazos y dedos.
Indicación terapéutica: Activa la musculatura lateral de la columna, del músculo erector de la columna, el trapecio, el dorsal ancho etc., permitiendo plenitud de movimientos al estirar la columna e inclinarla para los lados.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: los brazos no permanecen estirados, flexionar las rodillas, arquear los hombros o girar el tronco.

8vo Movimiento: Girar la cintura y Proyectar las palmas
Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas a la distancia entre los hombros. Colocar los puños a nivel de la cintura.
1: Empuje la palma de la mano derecha hacia el frente, estirando el brazo, simultáneamente mantenga el puño izquierdo en su posición inicial, proyectando el codo hacia atrás y ejerciendo la acción de jalar con el puño, manténgalos alineados con la palma derecha. (Transición 1). Gire el tronco y la cabeza hacia   la    izquierda,   mirando  hacia   atrás,   al   horizonte (Posición 1).
2: Gire el tronco hacia el frente, recogiendo el brazo derecho, simultáneamente gire y cierre la palma de la mano derecha (Transición 2). Vuelva a la posición inicial.
3: Empuje la palma de la mano izquierda hacia el frente, estirando el brazo, simultáneamente mantenga el puño derecho en su posición inicial, proyectando el codo hacia atrás y ejerciendo la acción de jalar con el puño, manténgalos alineados con la palma izquierda (igual que en la Transición 1). Gire el tronco y la cabeza hacia la derecha, mirando hacia atrás, al horizonte (Posición 2).
4: Gire el tronco hacia el frente, recogiendo el brazo izquierdo, simultáneamente gire y cierre la palma de la mano izquierda (igual que en la Transición 2). Vuelva a la posición inicial.
Posición final: Bajar los brazos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Mantener el tronco erguido al girar la cintura y proyectar las Palmas, sin doblar el tronco para el frente o para atrás. Al girar la cintura, un brazo es proyectado extendido en la línea lateral del cuerpo, mientras el otro permanece doblado, proyectando el codo hacia atrás también en la línea lateral del cuerpo. Eso permite que la cintura gire el máximo posible; los brazos deben estar alineados. Además, las piernas también deben estar estiradas y la mirada hacia atrás.
Sensación: Sensación de alivio en la cintura que se irradia por toda la columna y los hombros.
Indicación terapéutica: Entrena los músculos que están al lado de la columna, como la musculatura paravertebral, aumenta la capacidad de rotación de las vértebras lumbares, mejorando el tono muscular, estabilizando la columna y corrigiendo desvíos tales como la escoliosis.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: no mantener el tronco erguido al girar la cintura, curvarse al frente, no girar la cintura lo suficiente y no mantener los brazos en alineación al frente y atrás del cuerpo con la línea lateral del cuerpo.

9no Movimiento: Rotar la Cintura con las Manos en los Riñones
Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas a la distancia entre los hombros. Colocar las palmas de las manos a nivel lumbar con el pulgar hacia delante y la punta de los dedos medios entre la 4ta y 5ta vértebra lumbar.

1: Gire la Cadera hacia la izquierda (Posición 1).
2: Gire la Cadera hacia adelante (Posición 2).
3: Gire la Cadera hacia la derecha (Posición 3).
4: Gire la Cadera hacia atrás (Posición 4).
Repita nuevamente el movimiento girando en el sentido contrario
1: Gire la Cadera hacia la derecha (Posición 1).
2: Gire la Cadera hacia adelante (Posición 2).
3: Gire la Cadera hacia la izquierda (Posición 3).
4: Gire la Cadera hacia atrás (Posición 4).
Posición final: Bajar los brazos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: realizar un círculo lo más amplio posible con las caderas, y el menor posible con la cabeza y parte superior del tronco. El movimiento de rotación de la cintura debe ser lento, continuado y equilibrado, sin interrupciones. Se debe mantener las piernas rectas, sin flexionar las rodillas, acompañando con las piernas la rotación de la cintura.
Sensación: Alivio y sensación de expansión en la región lumbosacra.
Indicación terapéutica: Hace que la 4ª y la 5ª articulaciones intervertebrales lumbares se muevan sin roce, especialmente para mejorar el alargamiento de la columna y fortalecer el músculo erector de la columna, y mantener o corregir la curvatura fisiológica de la columna lumbar.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: Rotar el tronco envés de la Cadera, inclinarse demasiado hacia adelante cuando giramos la cadera hacia atrás, flexionar las rodillas cuando se hace la rotación.

10 mo Movimiento: Abrir los Brazos y Flexionar el Tronco

Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas a la distancia entre los hombros. Colocar las palmas de las manos cruzadas (sobrepuestas) a la altura del bajo vientre. Brazos sueltos y hombros relajados.
1: Levantar las manos sobrepuestas, con los brazos extendidos (Transición 1), la cabeza acompaña el movimiento hasta alcanzar el punto máximo por encima de la cabeza.  (Posición 1).
2: Baje los brazos lateralmente hasta alcanzar el nivel de los hombros, palmas hacia arriba y mirada al frente. (Posición 2).
3: Gire las palmas de las manos hacia abajo, al mismo tiempo que flexiona el tronco hacia delante (con las palmas hacia abajo, manteniendo los brazos extendidos lateralmente, columna y cabeza erguida, y mirada al suelo) (Posición 3).
4: Descender las manos hasta el piso, quedando sobrepuestas (los dedos deben tocar el suelo, mano derecha encima de la izquierda). (Posición 4).
5: Suba las manos hasta alcanzar la Posición 1 (por delante, manteniendo la columna y los brazos extendidos y alineados - Transición 2).
Posición final: Bajar los brazos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Mantener los brazos en la misma línea de los hombro y relajados al flexionar el tronco, levantar la cabeza al mismo tiempo que baja el tronco; después, los brazos bajan lentamente y las manos se ponen sobrepuestas. Se levantan los brazos hasta la altura de las orejas para finalmente levantar el tronco. Además, recuérdese de mantener las piernas rectas y en el momento de flexionar el tronco, busque tocar el piso con la punta de los dedos.
Indicación terapéutica: fortalecer los músculos del tronco, como el músculo erector de la columna y el dorsal ancho, y mejorar la movilidad de las articulaciones intervertebrales.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: tensar los brazos o mantenerlos fuera de la línea de los hombros, bajar la cabeza o arquear los brazos para atrás.

11er Movimiento: Proyectar la mano en forma de lanza hacia el lado
Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas ampliamente, manos cerradas  nivel de la cintura. Vista al frente.
1: Apoyado en el talón izquierdo gire la punta del pie hacia la izquierda a 90°, girando simultáneamente el tronco en la misma dirección, abriendo el puño derecho, y desplazándolo al frente jalando el puño izquierdo hacia atrás (Transición 1). Estire la pierna derecha y flexione la izquierda, proyecte su mano derecha oblicuamente hacia arriba para el lado izquierdo (pulgar a la altura del vértice de la cabeza) y el codo izquierdo en el sentido opuesto (Posición 1).
2: Gire la punta del pie izquierdo al frente, girando simultáneamente el tronco, cerrando y recogiendo la mano derecha. Adopte la posición inicial.
3: Apoyado en el talón derecho gire la punta del pie hacia la derecha 90°, girando simultáneamente el tronco en la misma dirección, abriendo el puño izquierdo, y desplazándolo al frente jalando el puño derecho hacia atrás (Transición 3). Estire la pierna izquierda y flexione la derecha, proyecte su mano izquierda oblicuamente hacia arriba para el lado derecho (pulgar a la altura del vértice de la cabeza) y el codo derecho en el sentido opuesto (Posición 2)
4: Gire la punta del pie derecho al frente, girando simultáneamente el tronco, cerrando y recogiendo la mano izquierda. Adopte la posición inicial.
Posición Final: Recoja el pie izquierdo hacia el derecho, baje los brazos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Apertura amplia de las piernas, mantener firme la postura de las piernas; mantener el tronco erguido, la pierna de atrás extendida, el tobillo firme y el brazo de la palma en lanza  extendido. Se debe mantener el principio de "los tres rectos": tronco recto, pierna recta y brazo recto. Mientras una palma se estira para un lado, el otro brazo permanece flexionado al lado del cuerpo, pero también proyectando el codo en la dirección opuesta a la de la palma.
Sensación: Movilizando Nei Jing (energía interior) para que el tronco, al girar, produzca una percepción intensa del Qi.
Indicación terapéutica: Este ejercicio fué creado de maniobras de Tui-ná. Entrena principalmente la musculatura de la cintura, de la espalda y de las piernas, y la movilidad de las articulaciones posteriores de la columna lumbar. Es eficaz para corregir desvíos y desórdenes de esas articulaciones y para tratar el endurecimiento de  las membranas y ligamentos.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: poca apertura de las piernas, inclinar el tronco para adelante, mantener muy baja o muy alta la palma que se proyecta, pierna de atrás flexionada y girar el tobillo hacia adentro.


12do Movimiento: Tocar los pies con las manos
Posición inicial: De pie, con las piernas juntas, cuerpo recto y brazos sueltos a lo largo del cuerpo.
1: Entrelazar los dedos de las manos a la altura del abdomen (palmas hacia arriba) (Transición 1), subir las manos manteniéndolas entrelazadas hasta la altura del mentón (Transición 2), seguidamente gire las palmas por delante de la cara y empuje las manos hacia arriba por encima de la cabeza, estirando bien los brazos y estirando la cabeza. (Posición 1).
2: Flexione el tronco hacia delante con la cabeza levantada (mirando el dorso de las manos), mantenga los brazos y el tronco extendido hasta alcanzar el nivel horizontal (Posición 2).
3: Baje los brazos hasta tocar los pies con las manos (relaje la cabeza manteniendo la mirada en el dorso de las manos) (Posición 3).
4: Vuelva a la posición inicial deslizando sus manos por la cara antero-lateral de piernas y muslos (Transición 3) mientras va  enderezando el tronco lentamente.
Posición final: De pie, con las piernas juntas, cuerpo recto y brazos sueltos a lo largo del cuerpo.

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Levantar la cabeza al flexionar el tronco para delante y mantener los brazos firmemente junto a las orejas. Después, lentamente, llevar las manos hasta los pies, detenerse un momento en esa posición y volver a la postura inicial. Se debe tener el cuidado de mantener las piernas extendidas y buscar al máximo tocar con las manos los pies. El movimiento debe ser lento, continuado y equilibrado.
Sensación: Alivio en el cuello, hombros y cintura al estirar los brazos y flexionar el tronco.
Indicación terapéutica: Alargar los ligamentos supraespinoso, interespinoso y longitudinal posterior, y ejercitar el músculo erector de la columna, el músculo dorsal ancho, el músculo psoas mayor y los músculos de los miembros interiores, tales como el bíceps femoral, semitendinoso y semimembranoso.
Los errores más frecuentes en la ejecución de este ejercicio son: No descender los brazos junto con el tronco, flexionar las rodillas y bajarla cabeza.



    
     Esta serie pueden verla por: youtube.com, para así tener un idea mejor de la dinámica de los movimientos, la cadencia, la postura corporal... : 
www.youtube.com/watch?v=0K2QrDGr-ME



Información extraída de los textos:  
Lian Gong Shi Ba Fa – Dr. Zhuang Yuan Ming
Lian Gong en 18 Terapias – Maria Lucia Lee.
 



lunes, 18 de enero de 2016

Lian Gong - 1ra Serie

1ra Serie – Ejercicios para la prevención y tratamiento de los dolores de cuello y hombros
Introducción
Los dolores del cuello y hombros son, en su mayoría consecuencia de tensión generalizada de la musculatura de esta región. Esta condición puede ser provocada por una mala postura, fatiga, movimientos bruscos o factores emocionales como la ansiedad, la irritabilidad, inseguridad o duda y preocupación.
Con esta primera serie de movimientos  se busca tratar y prevenir las afecciones de cuello, hombros y miembros superiores, con el objetivo de eliminar contracturas de la musculatura de esta región, o adherencias  en  los  tejidos  blandos, mejorando la circulación   de   sangre   y    energía, liberando las articulaciones, fortaleciendo el tono muscular y con eso recuperando el movimiento de esta área.
Las enfermedades más comunes de esta región son: Tortícolis, Cervicalgia y Periartritis de la articulación del hombro.

Importante: No olvide que mientras haga los movimientos de Lian Gong, debe mantener una buena respiración: Inspiración, Pausa y Espiración – esta última normalmente mientras proyecta la energía (realizando el movimiento).

1er Movimiento: Movimiento del cuello

Posición inicial: Pies separados a la anchura de los hombros, manos apoyadas en la cintura y mirada al frente.

Movimiento:
1: Girar la cabeza lentamente hacia la izquierda hasta su límite
                               (mirar hacia la izquierda).
2: Volver a la posición inicial.
3: Girar la cabeza lentamente hacia la derecha hasta su límite
                                 (mirar hacia la derecha).
4: Volver a la posición inicial.
5: Levantar lentamente la cabeza
          (mirar hacia arriba).
6: Volver a la posición inicial.
7: Bajar lentamente la cabeza
          (mirar hacia abajo).
8: Volver a la posición inicial.
Postura final: Bajar los brazos y dejarlos sueltos a lo largo del cuerpo.

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Los requisitos para la correcta ejecución de este ejercicio son: realizar los movimientos de elevar, bajar y girar el cuello para los lados con la mayor amplitud posible, actuando principalmente sobre la parte superior del músculo trapecio. La rotación natural del cuello es de 60° para cada lado y, al bajar la cabeza, la barbilla toca la parte superior del esternón, mientras que para atrás, el hueso occipital casi toca las primeras vértebras torácicas. El objetivo de este ejercicio es ejercitar los músculos de la región del cuello y liberar el movimiento de las vértebras cervicales.
Percepción sensorial del Qi: Alivio de la musculatura en la región del cuello.
Errores más frecuentes: Inclinar la cabeza o girar el tronco para el lado al girar el cuello, y proyectar el abdomen y flexionar el tronco al bajar a cabeza.


2do Movimiento: Arquear las Manos

Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas con una separación algo mayor que la distancia entre los hombros. Los brazos separados del cuerpo se flexionan hacia arriba. Las manos abiertas al frente del rostro a unos 30 cm de éste, formando con ellas un triangulo con los índices y pulgares (las palmas deben mirar al frente). Vista al frente.
 
1: Separar las manos hacia ambos lados y al mismo tiempo cerrarlas (con el dorso del puño hacia atrás). Girar la cabeza hacia la izquierda (la mirada acompaña el puño izquierdo – mirando al horizonte por encima de él, sacando el pecho, manteniendo los antebrazos perpendiculares al suelo – paralelos al tronco y los codos hacia abajo). (Posición 1).
2: Volver a la posición inicial, abriendo las palmas de las manos y mirando la mano izquierda.
3: Separar las manos hacia ambos lados y al mismo tiempo cerrarlas (con el dorso del puño hacia atrás). Girar la cabeza hacia la derecha (la mirada acompaña el puño derecho – mirando al horizonte por encima de él, sacando el pecho, manteniendo los antebrazos perpendiculares al suelo – paralelos al tronco y los codos hacia abajo). (Posición 3).
4: Abrir las manos mirando la mano derecha y volver a la posición inicial.

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Al separar las manos, no se deben alzar los hombros. Los omóplatos deben acercarse a la columna vertebral. Ambos codos deben mantenerse al mismo nivel.
Sensación: Al expandir el pecho y mirar lateralmente al horizonte, hay una sensación de alivio en los músculos del cuello, hombros y espalda. Esta sensación puede llegar a ambos brazos. Al mismo tiempo, se tendrá una sensación de relajamiento en el pecho.
Indicación terapéutica: Útil para casos de dolores, debilidad y rigidez del cuello, hombros y espalda; entume­cimiento, hormigueo y adormecimiento de manos y brazos. También para la sensación de ahogo-angustia en el pecho.


3er Movimiento: Extender las manos hacia arriba


Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas con la separación algo mayor que la distancia entre los hombros. Flexionar los brazos de forma natural, hacia arriba a ambos lados del cuerpo. Posicionar los puños a ambos lados de los hombros (con las palmas hacia el frente). Vista al frente.

1: Mirar el puño izquierdo (Posición 1) y extender los brazos hacia arriba lentamente mientras se van abriendo las manos. Los ojos acompañan la mano izquierda. Palmas hacia el frente y la vista acompaña la mano hasta lo alto. (Posición 2)
2: Recoger los brazos, cerrar las manos y mantener la mirada en la mano izquierda. Posicionar los puños a ambos lados de los hombros (Posición 1).
3: Mirar el puño derecho (Posición 3) y extender los brazos hacia arriba lentamente mientras se van abriendo las manos. Los ojos acompañan la mano derecha. Palmas hacia el frente y la vista acompaña la mano hasta lo alto. (Posición 4)
4: Recoger los brazos, cerrar las manos y mantener la mirada en la mano derecha. Posicionar los puños a ambos lados de los hombros (Posición inicial).

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Subir los brazos perpendicularmente al piso, estirar bien los brazos sin proyectar el abdomen hacia delante.
Sensación: Al extender los brazos, mirando la mano correspondiente, se siente alivio en el cuello, columna dorsal alta y en los hombros.
Indicación terapéutica: Útil para casos de dolores del cuello, hombros, espalda y disfunción de la articulación del hombro (por ejemplo: periartritis y dificultad para elevar los brazos.


4to Movimiento: Expandir el Pecho

Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas con una separación algo mayor que la distancia entre los hombros. Manos superpuestas frente al cuerpo (mano izquierda al frente o mano enferma encima de la sana). Vista al frente.

1: Levantar los brazos extendidos al frente del cuerpo, manteniendo las manos cruzadas o superpuestas y mirando el dorso de las mismas. Las palmas por encima de la cabeza se mantienen superpuestas, los brazos se mantienen cerca de las orejas y la cabeza levantada mirando las manos (Posición 1).
2: Girar las manos hasta que las palmas queden volteadas hacia arriba (supinación), bajar las manos, trazando una curva por la lateral del cuerpo por detrás de la línea de los hombros, acompañando la palma izquierda con la mirada (Transición 2 y 3). Volver a la posición inicial.
3: Levantar los brazos extendidos al frente del cuerpo, manteniendo las manos cruzadas o superpuestas y mirando el dorso de las mismas. Las palmas por encima de la cabeza se mantienen superpuestas, los brazos se mantienen cerca de las orejas y la cabeza levantada mirando las manos (Posición 1).
4: Girar las manos hasta que las palmas queden volteadas hacia arriba (supinación), bajar las manos, trazando una curva por la lateral del cuerpo por detrás de la línea de los hombros, acompañando la palma derecha con la mirada (Transición 2 y 3 hacia la derecha). Volver a la posición inicial.
Posición Final: Colocar los brazos a lo largo del cuerpo.

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Al realizar el movimiento de supinación de las manos y ejercer el movimiento de descenso circular amplio de los brazos, hay que mantener los brazos bien estirados y el cuerpo erecto.
Sensación: Al levantar los brazos y la cabeza, se siente alivio en el cuello, hombros y cintura.
Indicación terapéutica: Periartritis o disfunción de la articulación del hombro, dolores en cuello, hombros, espalda y zona lumbar.


5to Movimiento: Desplegar las Alas

Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas con una separación algo mayor que la distancia entre los hombros. Vista al frente.

1: Flexionar los brazos dirigiendo los codos para atrás y hacia arriba - por detrás de la línea media axilar, “Desplegando las Alas”, manteniendo las manos cerca del cuerpo (Transición 1). Acerque el dorso de las manos al mentón – por debajo de el – con los codos por encima del nivel de las cejas, acompañando el codo izquierdo con la mirada (Transición 2). Manos sueltas debajo del mentón y codos por encima del nivel de las cejas. Mirada al frente (Posición 1).
2: Las manos quedan extendidas hacia el frente del rostro – con los centros de las palmas una frente a la otra. Bajar los codos, extender los brazos y empujar las manos hacia abajo (Transición 3 y 4). Volver a la posición inicial.
3: Flexionar los brazos dirigiendo los codos para atrás y hacia arriba - por detrás de la línea media axilar, “Desplegando las Alas”, manteniendo las manos cerca del cuerpo (Transición 1). Acerque el dorso de las manos al mentón – por debajo de el – con los codos por encima del nivel de las cejas, acompañando el codo derecho con la mirada (Transición 2 pero a la derecha). Manos sueltas debajo del mentón y codos por encima del nivel de las cejas. Mirada al frente (Posición 1). Repetimos el punto 2 y retornamos a la posición inicial.
Posición Final: Colocar los brazos sueltos a lo largo del cuerpo.

Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Hay que prestar atención en el cambio de mirada que acompaña al codo izquierdo y derecho alternadamente. Cuando las manos presionan para abajo, la mirada va al frente. No tensionen los hombros. Al bajar las manos no mantenga los codos en alto.
Sensación: Alivio en los hombros y región costal – a ambos lados. Sensación de alivio en la musculatura de esa región que puede irradiar a los brazos.
Indicación terapéutica: Rigidez en los hombros, brazos y disfunción de los movimientos de las extremidades superiores, como en el caso de bursitis, tendinitis, hombro congelado…


6to Movimiento: Levantar el brazo de hierro

Posición inicial: De pie, con las piernas abiertas con una separación algo mayor que la distancia entre los hombros. Brazos relajados a ambos lados del cuerpo. Vista al frente.

1: Levantar el brazo izquierdo lateralmente manteniendo la palma de la mano hacia abajo. Colocar el brazo derecho flexionado por atrás con el dorso de la mano presionando el lado izquierdo de la cintura lumbar. Mantener la vista en la mano izquierda (Transición 1). Llegando al estiramiento máximo del brazo izquierdo – por encima de la cabeza, se voltea la palma de la mano hacia arriba. (Transición 2). Palma izquierda volteada hacia arriba con los dedos de la mano apuntando hacia atrás. Mirar la mano izquierda (Posición 1).
2: Bajar lentamente el brazo izquierdo con la palma de la mano hacia abajo, acompañando el movimiento con la vista (Transición 3).  Colocar la mano izquierda en la espalda por encima de la mano derecha  (Posición 2).
3: Levantar el brazo derecho lateralmente manteniendo la palma de la mano hacia abajo. Colocar el brazo izquierdo flexionado por atrás con el dorso de la mano presionando el lado derecho de la cintura lumbar. Mantener la vista en la mano derecha (Transición 1 pero con la derecha). Llegando al estiramiento máximo del brazo derecho – por encima de la cabeza, se voltea la palma de la mano hacia arriba. Palma derecha volteada hacia arriba con los dedos de la mano apuntando hacia atrás. Mirar la mano derecha (Posición 1, pero con la derecha).
4: Bajar lentamente el brazo derecho con la palma de la mano hacia abajo (como lo hicieron en el lado izquierdo), acompañando el movimiento con la vista.  Colocar la mano derecha en la espalda por encima de la mano izquierda.
Posición Final: Colocar los brazos a lo largo del cuerpo.
Número de repeticiones: Realizar la serie de 2 a 4 veces muy despacio.
Alerta: Evitar inclinar el tronco mientras estiramos el brazo por encima de la cabeza.
Sensación: Al estirar el brazo por encima de la cabeza, se siente alivio en el cuello, hombros y pecho.
Indicación terapéutica: Rigidez y dificultad de movimiento de la articulación del hombro, dolores en cuello, hombros, espalda y zona lumbar.
     
     Esta serie pueden verla por: youtube.com, para así tener un idea mejor de la dinámica de los movimientos, la cadencia, la postura corporal...
https://www.youtube.com/watch?v=HqGIG-WQm2M


Información extraída de los textos:  
Lian Gong Shi Ba Fa – Dr. Zhuang Yuan Ming
Lian Gong en 18 Terapias – Maria Lucia Lee.

Lian Gong Shi Ba Fa


Lian Gong  Shi Ba Fa (Lian Gong en 18 Terapias)
Gimnasia China  preventiva y terapéutica desarrollada
 por el Dr Zhuang Yuan Ming

La civilización china se fundó en el período de 2852 a.C. a 2400 a.C, cuando  gobernaron los tres emperadores míticos:
FU SHI - creador del matrimonio, descubrió la polaridad yin-yang y los 8 trigramas.
SHEN NUN - incentivador de la agricultura, domesticación de animales y fitoterapia.
HUANG DI - inventor de la brújula, de la medicina y de los ritos (ejercicios, movimientos, danzas).
Esta era legendaria o mítica estableció el aporte sobre el cual se edificaría la  longeva civilización china, cuyos principios influencian y dirigen el pueblo chino aun hasta hoy. Uno de estos principios es el de considerar la vida como lo más valioso y la longevidad como expresión máxima de sabiduría. La longevidad fue loada y cantada por poetas y sabios como Zhuan Zi, famoso filósofo que vivió durante el período de los Reinos combatientes (entre 403 a.C. y 227 a.C.), que escribió:

"Espirar e inspirar, expeliendo lo viejo y asimilando lo nuevo, para tornarse fuerte como un oso, vivo como un pájaro y alcanzar la longevidad".

La imagen del Santo de la longevidad (Lao Sou Xin), un anciano sonriente que asegura en sus manos un cayado y un durazno, es muy popular, frecuentemente encontrada en las casas de los chinos en forma de estatuilla, pintura o bordados.
La búsqueda de la longevidad y de realizarse plenamente en la vida que Ie fue concedida por el cielo hizo con que el pueblo chino sobreviviese  5.000 mil años de guerras,   invasiones,   catástrofes   naturales   y   hambre.   Contaron  con  la ayuda misericordiosa de innumerables Santos, sabios y médicos, que a lo largo de la historia china crearon, desarrollaron y enseñaron prácticas que tenían por finalidad fortalecer la mente, el cuerpo y las emociones. Se acumularon millares de ejercicios, movimientos, danzas y artes de guerra de todos los tipos, atendiendo la miríada de finalidades y necesidades, los cuales son practicados aun hoy por todo el territorio Chino por las mañanas o al final del día.
Actualmente estas prácticas son consideradas patrimonio nacional, pues garantizan la manutención de un estado de salud para el pueblo chino, que corresponde a 22% de la población de la tierra, o sea, 1.150 millones de habitantes.
A pesar de la diversificación, todas las prácticas tiene un principio en común, o Dao-yin, que significa: inducción de la circulación del qi (soplo vital) y de la sangre. Originalmente, practicar el Dao-yin consistía en:
"Sacudir los músculos y los huesos para mover las articulaciones y movilizar el qi y la sangre, haciéndolos fluir."
El Dao-yin consiste en una gimnasia terapéutica muy antigua. En el libro Huang-Di Nei jing, canon de medicina del Extremo Oriente, cuya autoría es atribuida al mítico emperador Huang-Di (Emperador Amarillo), el Dao-yin es citado en uno de sus capítulos de la siguiente forma:
"El suelo de la zona central es húmedo y raso; así, las enfermedades que en él ocurren son: debilidad, calambres, gripes y fiebres. El  tratamiento indicado es el Dao-yin (ejercicios) y el Tui-ná (Masaje)"
En 1973, en las excavaciones realizadas en la tumba n°3 de la época de la Dinastía Han (Antiguo Imperio, 206 a.C. a 220 d.C.) en Ma Wang Dui, Changsha, China, fueron encontrados libros de medicina que contenían piezas de seda con dibujos de más de 40 posturas del Dao-yin. Hasta ahora son las ilustraciones de Dao-yin más antiguas de la historia china.
A finales de la dinastía Han, el famoso médico chino Hua Tuo (141-208), teniendo como principio el Dao-yin, elaboró el famoso "Juego de los 5 Animales", una serie de ejercicios terapéuticos basados en los movimientos del venado, del oso, del tigre, del mono y de la garza, trabajando en la prevención y el tratamiento de enfermedades.
En el imperio del Medio, durante la dinastía Suei (581-617) y Tang (618-907), el Dao-yin fue oficialmente reconocido como un tipo de tratamiento importante y ampliamente aplicado a terapéutica médica. Desde esta época surgieron muchos ejercicios para el fortalecimiento físico derivados del Dao-yin, tales como: Qi Gong (206 a.C. a 220 d.C., Antiguo Imperio), Ejercicios para la regeneración de los músculos y tendones (502 a 549, Imperio Medio), Ejercicios de los 8 brocados de seda (1127 a 1279, Imperio Nuevo), Tai Chi Chuan (1227 a 1279, origen legendario, Nuevo Imperio), etc.
En la década de 1970, el Dr Zhuang Yuan Ming crea y desarrolla el Lian gong en 18 terapias basado en su conocimiento en las artes de salud antes mencionadas y evidenciando la necesidad imperiosa por parte de los pacientes de una terapia práctica que los pueda ayudar. Llegó a ver hasta 500 pacientes en un día en el departamento de ortopedia del hospital donde trabajaba en Shangai. Los dolores en los hombros, cuello, lumbares, extremidades… son síndromes comunes y crónicos entre los trabajadores tanto rurales como de las fabricas.
Los resultados de la “gimnasia por prescripción medica” para que el paciente la realice en su casa no se hicieron esperar y con excelentes resultados, pudiendo observar que aquellos pacientes que realizaban las prácticas en casa tenían resultados más rápidos y estables que aquellos que no. Hoy día es una práctica ya expandida por todo el mundo por su eficacia comprobada tanto en la prevención como en la Sanación.

Los principios de la práctica en 11 fraces

1.       Movimiento global, foco específico. (Zhen Duei Xu Yao)
2.       Entrenar con alegría. (Le Guan Duan Lien)
3.       Realizar el movimiento de forma lenta, equilibrada y continua. (Huan Man Lien Guan)
4.       Coordinar movimiento y respiración. (Pei He Hu Xi)
5.       Movimiento con el cuerpo, ordenado, estructurado y alineado. (Dun Zuo Zen Qie)
6.       El movimiento debe ser amplio. (Fu Du Yao Da)
7.       Mover la forma interna. (Qian Diao Nei Jing)
8.       La finalidad principal es obtener el Qi. (De Qi Wei Yao)
9.       Práctica con la dosificación adecuada. (Huo Dun Si Lian)
10.   Perfeccionar la práctica gradualmente. (Zhu Jian Ti Gao)

Prevenir las enfermedades y tratarlas, esta en la persistencia y regularidad de las prácticas. (Fan Bin, Zi Bin, Guei Zhai Jien Ci).

Información extraída de los textos: 
Lian Gong Shi Ba Fa – Dr. Zhuang Yuan Ming y 
Lian Gong en 18 Terapias – Maria Lucia Lee

Próximamente desarrollaremos los 18 movimientos por serie:
1ra Serie – Ejercicios para la prevención y tratamiento de los dolores de cuello y hombros.
2da Serie – Ejercicios para la prevención y tratamiento de los dolores de Espalda.
3ra Serie – Ejercicios para la prevención y tratamiento de los dolores en los Glúteos y  piernas.